Saturday, May 7, 2011

#5

Después de unos cuantos meses de descanso, tomados quizá para intentar olvidarte, cosa que aún no logro conseguir, un incidente muy poco casual nos reúne nuevamente. Para mí, el móvil es tan inútil, que muy pocas veces cargo con él, no tengo una adoración ridícula hacia éste aparato; pero curiosamente siempre que apareciste y apareces tú en la pantalla, sólo me quedo viendo esa pequeña pantalla con los ojos más expectantes que puedas imaginar. Entonces éste nuevo encuentro iniciado con constantes conversaciones, mensajería telefónica e instantánea, muestran una persona bastante diferente a la que tenía por acostumbrado, así usualmente jugábamos a intentar algo, hasta que decidimos concretarlo…
La más calurosa tarde de mayo, podría culpar a mi ritmo cardíaco, pero atribuyámosle tal detalle al humor del clima, estoy camino a encontrarme contigo, pensando en qué estoy haciendo.. Finalmente estás tú allí, incitándome a regalarte el por qué de mi visita, después de incómodas preguntas y miradas, después de jugar como idiotas, sabiendo lo que pasaría, yo a un paso de un ataque de miedo, decido acabar con ello. Tristemente lo anuncio, y sólo busco tu rostro, presionando mis vírgenes labios en los tuyos, representando el final de una historia que nunca comenzó.